¿Bajar los brazos?

Comienza una semana en la que muchas cosas parecen cambiar,para que todo siga igual.Manifestaciones,acampadas,paralización de desahucios,movilización ciudadana,represión,nueva política,viejas costumbres y un sin fin de términos que podríamos acuñar para definir estos cinco años desde aquella Spanish Revolution,que durante un instante nos hizo pensar,al que más o al que menos,que realmente podríamos cambiar las cosas.

Cinco años  de luchas y de esperanza,en los que ha cambiado el rey pero permanece la monarquía,en los que han cambiado los cargos pero permanece la impunidad y lo más lamentable de todo:cinco años en los que han cambiado las marionetas pero persisten sus titiriteros.

Cometimos el grave error de abandonar las calles para confiar el peso del cambio de nuevo a las urnas.Pensamos que podríamos cambiar su juego desde dentro y nos encontramos con que es difícil saltarse las reglas sin de vez en cuando romper alguna carta.Sus leyes mordaza,sus amnistías fiscales,sus desequilibrios electorales,sus pactos con la fiscalía…,miles de atajos para unos pocos,los de siempre,que pese a todo,continúan dominando el juego que parece someternos a todos.

Tuvimos nuestra gran oportunidad en el inicio de esta crisis que no comenzamos.Tuvimos la oportunidad de acorralar a los bancos,de exigir la nacionalización de los mismos,de deshacernos de una desprestigiada clase política y de una pseudodemocracia que lleva demasiado tiempo anclándonos en este eterno 1984 y  a golpe de huelgas y manifestaciones,exigir un cambio drástico en un modelo productivo que esclaviza el esfuerzo de todos para el beneficio de unos pocos.

Pero la perdimos,perdimos aquella oportunidad.Acorralados entre el bombardeo sus mass media y en estado de shock ante los despidos en masa,terminamos por creernos aquel mea culpa de que el colapso financiero era nuestra responsabilidad,que habíamos vivido por encima de nuestras posibilidades hipotecando nuestras vidas y que hora debíamos asumir las consecuencias.Y cuando eso no funciono,simplemente centraron nuestro odio en los inmigrantes o en cualquier otro colectivo que pudiese resultar una presa fácil.Utilizaron nuestra falsa sensación de pertenencia a una clase media,para desviar el odio hacia abajo,mientras intentaban mantenernos aletargados.Nos dijeron que la austeridad era necesaria,que de esa manera  pronto fluiría el crédito.Nos prometieron que volverían los tiempos del dinero fácil,de aquellos prestamos que no podemos pagar concedidos para cosas que no necesitamos.Y eso nos tranquilizó,y continua haciéndolo,aunque en el mejor de los casos sea una cruel mentira.

Apelaron a nuestro ansía consumista para lograr crucificar nuestra sanidad,nuestra educación y nuestras libertades en pos del dios dinero y el gran pecado original del consumismo.Nos engañaron diciéndonos que Syriza o Podemos,eran los bolcheviques de nuestro tiempo y dejaron que estos,no sé si por ignorancia o simplemente por creer que era lo mejor para avanzar en su eterna derrota,vaciaron las calles y las plazas abandonando a su suerte a esos últimos soldados del Kronstadt,en forma de huelgas y movimientos antisistema que todavía entonces,quién sabe si con más o menos razón,seguían gritando al mundo que nada cambiaría si terminaban sacándonos de las calles.

Cinco años para encontrarnos en España,ante un pacto entre los mal llamados socialistas y una derecha nueva,pero con ese viejo olor a rancio.Cinco años que nos recuerdan que tanto ha cambiado,pero que no se ha movido nada.

Lema15m

Autor: @SeijoDani

 

 

6 respuestas a “¿Bajar los brazos?

Add yours

  1. Quizás el error del 15M fue el de no haber aportado ideas concretas y sí mucha ilusión. Pero ahora, con las mareas organizadas y las izquierdas dando guerra en el Congreso, tenemos la oportunidad de que la política nis sea devuelta al pueblo, de donde nunca debió salir.

    1. Comparto totalmente la necesidad de un partido que represente el sentir de la ciudadanía en el Congreso,pero considero igualmente necesario un movimiento sindical a la altura que devuelva la presión a las calles,al igual que considero que deben existir movimientos sociales que trabajen alejados de la política parlamentaria para mayor democratización de la sociedad española.Dos campos de actuación,un mismo objetivo:una democracia real.Muchas gracias por tus comentarios Carmen,un cordial saludo.

      1. Sí, cierto. Los movimientos sindicales y el asociacionismo son necesarios para vigilar de cerca a los poderes.
        Saludos!

      1. Berta Cáceres fue una luchadora incansable por los derechos de una las comunidades más pisoteadas por aparatos del Estado. Nuestra deuda con nuestros aborígenes es inmensurable con cualquier bien material.

Deja un comentario

Blog de WordPress.com.

Subir ↑